ECOS URBANOS
¿Y las filas de Colima?
Sergio Ursúa*
“Pensar en la cultura como algo superficial y prescindible es un síntoma de subdesarrollo”
Rosaura Barahona (1942-¿?)
Periodista y escritora mexicana
De entre las muchas cosas que tiene me gustan de Monterrey es leer a la señora Barahona. Su nombre completo es Rosaura del Pilar Teresita Barahona Aguayo y le gusta de decir las cosas como son sin dejarse nada para ella, todo lo dice, todo lo comenta, todo lo critica y a veces llega a causar revuelo o herir algunas (o muchas) susceptibilidades. Ha estado ya un par de veces en Colima y sus conferencias son siempre muy aplaudidas.
En su última columna (Grupo Reforma, periódico El Norte, edición del jueves 17 de enero) escribe acerca de una ciudad de Monterrey colmada por las colas para entrar a los diversos espectáculos culturales que se ofrecen en esa ciudad y de cómo la gente se ha ido acercando a la cultura, a diferencia de años anteriores donde la gente era escasa en los eventos.
Al terminar de leer el artículo, es inevitable voltear a ver a Colima y me doy cuenta que también hemos mejorado.
Hace no mucho años (en defensa de mi edad) fui parte de un grupo de locos que por unos días hizo una temporada de teatro en el imponente teatro Hidalgo. Era una buena comedia acerca de los enredos de un afinar de pianos en una casa donde asistía dar un servicio. A mi me gustaba mucho la obra y recuerdo con especial cariño a la gente que hacía teatro conmigo, Javier Ruíz, productor, director y actor de la obra, de la obra, y los actores, Rabindranath Luna, Citlali Morales, María Gómez, Cayo Urquijo, y Manuel Brust. Si bien es cierto que no éramos los grandes actores consumados, la obra era buena y en verdad que todos, poníamos el mejor empeño posible en nuestro papel.
La temporada se hizo en diciembre y para tristeza de nosotros, la sala apenas contaba, cuando bien nos iba, con 7 ú 8 gentes.
Como decía, da gusto saber que las cosas han cambiado. Da gusto saber que las presentaciones culturales cuentan con mucho seguidores y que si bien no hay filas como las de Monterrey, si hay quórum que nos hace ver que la gente en Colima se acerca cada vez más a la cultura.
Aunque en últimas fechas, algunas manifestaciones culturales han sido puestas en tela de juicio por quien y como se proponen o por su impacto visual (recuerdo metros y metros de pabilo en los camellones, tela sobre el Rey Coliman, etc.) esto no debe ser motivo para dejar de ver y disfrutar lo que presenta en Colima. Si usted mira alredor, en los diferentes foros se dará cuenta que hay para todos los gustos. Por ejemplo, nada más por este fin de semana, abro el Ecos de la Costa en su edición del viernes y encuentro, el estreno de la obra “Tatuaje”, música Jarocha, talleres literarios, danza contemporánea, zanqueros, cuentacuentos, exposiciones de pintura, solo por mencionar algunos.
Y es que acercarnos a la cultura, va dejando sus muy buenos frutos por todos lados. Discos de grupos locales (CuerdaCueroyCanto, y no, no es falla de la barra espaciadora, ellos llegan a punto del colapso si su nombre no es escrito de esta manera) libros con importantes editoriales (desde esta humilde columna una felicitación más al buen Rogelio Guedea), el paso por Colima de grandes eventos nacionales e internacionales como el Ballet Trocadero de Montecarlo, sólo por mencionar algunas de las cosas buenas que nos trae hacerle caso a la cultura.
Vamos bien, pero todavía nos falta apoyar más. Insisto, no se fije usted por quien convoca o como, solo sea un público agradecido con las esfuerzos de mucha gente por ofrecer cultura de todas las formas y colores.
Ya viene el Encuentro Internacional de Comedia del Arte (con Expo de Máscaras incluida), el Carnaval 2008 de Colima, más obras de teatro, y eventos donde tenemos que estar ahí aplaudiendo y conociendo, por ahí nos vemos. Y por aquí nos leemos: sergioursua.blogspot.com.
sergioursua@itesm.mx
* El colaborador es Director de Asuntos Estudiantiles del Tecnológico de Monterrey y de Reto Extremo en TecMilenio
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