Kafka... metamorfosis o sólo cambio de actitud

Definitivamente lo cito, pero definitivamente no puedo decir que me siento como él.

Leer metamorfosis puede ser un ejercicio de cataris pero no estoy para tanto.

De repente me doy cuenta que el mundo donde vives no es ideal, y eso de "el mundo no es ideal" me lo decía el buen Helios Vidales a ese al que Rangel lo tenga en su gloria (trabaja en Campus Monterrey pues) pero entre que el mundo no es ideal y yo peco de no poder olvidar (juro que sin ser rencor) lo que la gente he hecho a mi favor o a mi contra, pues me suelo topar con un mundo que obviamente no es ideal y que además queda cerca de lo bizarro.

Eso de andar siempre de alegre (y evítense explicarme la teoría de Nieztche del camello, al león y el niño, ya me la explicaron y pues... chida... bien por los que se la saben) no me ha dejado buenas cosas ahora que hago un balance de todo lo que me ha pasado.

Y es que parece que por ser todo buena gente y con cara de que el mundo es mi cuate, lo único que me ha provocado, es que por esa cara de buena gente haga que me dan atole con el dedo y no me ajustan los dedos de la mano para contar las personas que después de darme atole con el dedo, llegan por atrás a clavarme el puñal.

Afortunadamente esto ha sucedido en un 90% en el trabajo, y mi única reflexión (no queja) es que si puedo presumir que el ambiente laboral en el Tec es MUY bueno, no me quiero ni imaginar como será el ambiente en otros trabajos.

¿Qué voy a hacer? Pues fácil, cambio en dos direcciones, cambio hacia la derecha y hacia la izquierda. La derecha, el rictus de mi cara y la izquierda tomaré ese consejo que me dieron acerca de aprender a que me resbalen las cosas lo más pronto posible.

Fuera del Tec, con mis hijos, soy el mismo de siempre, dentro de las actividades del trabajo, claro que seré el mismo, no me gustan las caretas, como las que usan muchos en mi trabajo, pero además de ser yo mismo, por varias razones que no explico, vale la pena dejar de poner cara de alegre aunque lo esté. Y le entraré al juego que les gusta jugar a casi todos, el de que la gente juzga por la impresión que se lleva de la gente.

Si se hieren suceptibilidades, como dije un día con toda certeza y con muy buenos resultados, "Guat a pity".

Me cansé de poner cara de alegre.

Adiós.