Son palabrería futbolera...
Estadísticamente todos los equipos de futbol "normales", de todas las ligas, de todo el mundo, reciben en una campaña el siguiente trato por varias veces:
- Un mal partido
- Un brillante partido
- Un emocionante partido
- Un aburrido partido
- Ayuda de los árbitros (sin pedirla)
- Perjuicio de los árbitros (son desearla)
- Una buena cantidad de partidos ganados
- Una misma cantidad de partidos perdidos
Y algunas cosas más que se pueden agregar.
Los equipos que se salen de esta normalidad son campeones o van en descenso.
Al Real Madrid, le pasó ser parte de esta sencilla estadística y se comienza a ver la realidad de la distancia futbolística que hay entre el Barcelona. Ojo, yo tengo preferencia clara sobre el Real Madrid, pero también aprendo de lo que leo (hay que leer a Roberto Gómez Junco para entender más de futbol, sin fijarse en la televisora donde sale) y notó que la diferencia futbolística es poca y tiene su cuestión de lógica. El Barcelona con el mejor jugador del mundo, jugando como los dioses, el portero es regular, pero ni modo, pues no debe estar lejos del Real Madrid que va parejeando, eso sí, Messi va unos pasos adelante de Cristiano.
Como dijo el comentarista del juego de ayer, "señores, hay liga española"... Y a río revuelto, ganancia de pescadores.
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